martes, febrero 25, 2014

Delgado traicionó, le pegó a un periodista y ahora quiere desbancar a Fernando Asencio

Ya se quedó con la presidencia del bloque, protagonizó un escándalo con un comunicador y ahora está tratando de que su compañero de banca no gane la vicepresidencia segunda del Concejo Deliberante. El pago a Graciela Camaño está siendo caro para Sergio Massa. 

Ya era adepto a la lucha. Delgado, décadas atrás, con el luchador de chatch Martín Karadagian.

El debut de Abrahan “Toto” Delgado en su cuarto mandato como concejal de La Matanza viene siendo tan escandaloso, burdo y previsible como se esperaba. Dueño de todas las miradas críticas que hay sobre la vieja política local, el edil esperó a recuperar una migaja de poder para hacer valer su trayectoria de dirigente patotero. 

La cuestión Delgado se inició antes de las elecciones legislativas del año último, cuando el massismo recién empezaba a asomar la cabeza en La Matanza y ya se tiraban nombres de potenciales candidatos para las listas. A pesar de que no estuvo incluido hasta el último minuto, el Toto —así se lo conoce por estos terruños— entró por una pequeña ventana de atrás a la nómina de concejales, cuando Graciela Camaño pidió por él y Sergio Massa concedió la solicitud obligando a que tuviera un lugar. Por aquellos días, el hombre del barrio San Carlos se trenzó a los gritos con los demás referentes del massismo de La Matanza en una oficina de la ciudad de Buenos Aires. 

Después de largos años sin rasguñar las bondades de un puesto político, Abrahan “Toto” Delgado se coronó concejal por cuarta vez y en diciembre último llevó su banda al recinto para escuchar el vitoreo que no consiguió con López Murphy, ni con Juan Carlos Blumberg, ni con Macri, ni con tantos otros a quienes estafó en su ilusión de hacer pie en La Matanza. 

Para entonces ya había cometido el segundo traspié cuando participó de la reunión de nuevos concejales del Frente Renovador en la que se elegirían las autoridades. Por pedido de Julio Rubén Ledesma -a quien lo vincula una sociedad por lo bajo- Delgado pergeñó un enroque que le sacó el lugar de presidente de bloque al concejal Ariel Martínez, número puesto para el cargo. De esta manera, el peor representante del massismo local se quedó con el puesto de presidente de bloque. “Ariel no puede ser (presidente de bloque) porque no sabe negociar”, es la frase que le siguen adjudicando al Toto agregando una nueva mancha a su prontuario político. Ya en el sillón de supuesto mariscal, en su asunción quiso mostrarse con todos, como el primer pacifista, y hasta abrazó de prepo al intendente Fernando Espinoza posando para la foto. 

En su máxima expresión 

En diciembre, en la oficina del renovador Fernando Asencio estaba el periodista de La Matanza Gabriel Puebla, que cuando salió del despacho del edil se topó en la sala de estar con Abrahan Delgado. La relación entre el comunicador y el presidente del bloque del FR venía mal desde tiempo antes y eso sirvió para que Puebla -según denunció- recibiera una trompada del concejal. 

El escándalo derivó en una supuesta contradenuncia por “extorsión”, claro que la cosa parecía querer enmarañarse para sacar de foco la violencia con la que se manejó Delgado, una tipicidad que se le conoce y no puede ocultar. Sergio Massa se enteró del nuevo capítulo matancero vía Blackberry Messenger. Bastó que Fernando Asencio se solidarizara con Puebla para que Abrahan “Toto” Delgado apuntara todos sus dardos contra él. 

En las últimas semanas, los concejales no pasan por un buen momento en su relación, a punto tal que el presidente del bloque tiene la fuerza puesta en intentar destronar a Asencio de sus aspiraciones. ¿Cuáles?: ser el vicepresidente segundo del Concejo Deliberante. Ocurre que el Toto piensa que Asencio fue quien lo traicionó contándole a Massa lo sucedido y por eso puso en marcha el engranaje para dejarlo sin ese cargo en el HCD. 

Por ahora, los concejales Ariel Martínez y María Isabel Barreto -esta última referente de Miguel Saredi-, miran el partido desde afuera y parecen no querer jugarlo. La edil Laura Piperno podría inclinar el juego hacia Delgado, teniendo en cuenta que responde de manera directa al gremialista Julio Ledesma. 

El final de esta nueva etapa en la interna del Frente Renovador de La Matanza se sabrá en abril próximo, cuando se inicien las sesiones, día en que también debutarán votando la rendición de cuentas del año último, un detalle contable que tanto Asencio como Martínez siempre votaron de manera negativa o se abstuvieron.

S!C