jueves, octubre 24, 2013

La perversa estafa del hombre de Massa en La Matanza

Fernando Asencio es la cara visible del Frente Renovador en el distrito, pero esconde un pasado con demandas judiciales de casi 100 mil pesos. Además, habla un hombre discapacitado al que podrían rematarle su casa por un chantaje. 


Marcelo Maidana en su trabajo

Marcelo Maidana sufre ataxia de Friedreich, una extraña enfermedad por la que se le degrada el cerebelo y por la que padece una limitación motriz. El hombre vive en San Justo y ahora, para colmo de males, quedó en el medio de un conflicto con la Justicia que lleva como principal protagonista a Fernando Asencio, el primer candidato a concejal por el Frente Renovador en La Matanza. Lo más grave es que a Maidana le pueden rematar su casa. 

El origen de su calvario comenzó el 30 de marzo de 2009, cuando junto a Gladis Patricia Tapia puso su propiedad como garantía del alquiler de un local partidario ubicado en la calle Entre Ríos 3097 (San Justo), donde el concejal Asencio instaló en ese momento el Comando Central del Peronismo Federal. 

Massa y Fernando Asencio por las calles de San Justo

El tema es que años después y justo antes que se termine el contrato, el ahora hombre del massismo decidió “borrarse”. En el lugar no dejó ni un mueble, pero sí una deuda que, entre valores oficiales y en negro, alcanza los casi 100 mil pesos y es investigada por la Justicia Federal. Los que iniciaron la demanda contra el candidato del Frente Renovador fueron los propietarios del local, Gustavo Guillermo Morales y Pablo Horacio Morales, quienes demandan a Asencio por “Desalojo por falta de pago” y “cobro ejecutivo de alquileres”. 

En total, esa intimación alcanza la suma de 19.800 pesos en concepto de alquileres adeudados, más sus intereses y costas. Es en concepto de los montos impagos de enero, febrero, marzo, abril, mayo, junio, julio, agosto, septiembre, octubre, noviembre, diciembre de 2010 y enero, febrero del año 2011. 
Paralelamente, los hermanos Morales iniciaron otra causa por el cobro de pagarés por casi cien mil pesos que no habían sido abonados por parte de Asencio. Cabe destacar que se presume que la mayor parte del alquiler era abonado “en negro”, ya que fueron firmados el mismo día que se acordó el contrato de locación. 

La ligó de rebote 

“Yo confié mucho en él, por eso le salí de garante, y nunca pensé que me iba a hacer de no pagar”, dijo Maidana, quien ahora lucha por la intimación judicial que podría dejarlo en la calle a raíz de la estafa de Asencio. Por su discapacidad, el hombre instaló un kiosco en su vivienda ubicada en la calle Anatole France 4200, ya que no puede desplazarse con facilidad. Esa es su única fuente de trabajo. 

Llamativamente, Maidana casi no tuvo vínculo alguno con Asencio. “Lo conocí a través de una amiga que tengo, y a su a vez ella me lo presentó y confiamos en él”, expresó y agregó: “Desde el día que firmamos los papeles no lo vi nunca más”. Los propietarios del local de San Justo solicitaron el embargo preventivo y sentencia, sobre su propiedad, que figura como garantía ante el incumplimiento de los pagos del alquiler. 

Las deudas de Asencio 

En el expediente Nº 36.067/2012 (Morales Gustavo Guillermo C/Asencio Fernando Rodrigo y otros S/Ejecutivo) que tramita el Juzgado Nacional en lo Comercial N° 24, se demanda a Asencio un monto total de $ 50.133,66, sin incluir los costos y costas del juicio, por una serie de pagarés que llevan su firma y que nunca fueron abonados. En el otro expediente judicial, el N° 33.244/2013, la demanda es de $ 47.437,59. En total, la deuda es de casi $100 mil pesos y todo por el incumplimiento de pagos durante tres años. 

Una paradoja, uno de los últimos retweets que hizo el candidato Asencio en su cuenta de Twitter para reivindicar a su jefe: "El domingo la gente no nos va a dar un cheque en blanco, nos va a depositar un poco de su esperanza". 

Mejor, que ese cheque no llegue a sus manos.