sábado, mayo 15, 2010

Le dan $330 millones de planes sociales a Aníbal para publicidad y actos


El Gobierno reasignó partidas y giró fondos para del Plan Familia a la jefatura de Gobierno, $100 millones para pauta oficial y $230 millones para financiar los festejos del Bicentenario.


Alderete está que arde...


El Gobierno modificó ayer el Presupuesto Nacional y reasignó partidas que estaban destinadas al Plan Familias para financiar la pauta oficial y los gastos del festejo por el Bicentenario

Según el diario Clarín, a través de una norma publicada ayer en el Boletín Oficial, se destinarán para Prensa y Difusión de Actos de Gobierno $ 100 millones y otros $ 230 millones para las Actividades Centrales vinculadas a los eventos por el Festejo del Bicentenario.


Aníbal Fernández


En total, la Jefatura de Gabinete recibe $ 330 millones para engordar su presupuesto. En el mismo decreto también se aprueban otros gastos corrientes y de inversión y se ajustan haberes de pensionados y retirados de las Fuerzas de Seguridad con mayores ingresos de esos mismos sectores.

Los nuevos gastos se financian, en parte, con fondos que provienen del Ministerio de Desarrollo Social, más específicamente del Plan Familias, destinado a sectores indigentes y pobres con hijos. De allí se reducen $ 671.400.000.

El presupuesto del Plan Familias puede reducirse porque los beneficiarios de ese Plan pasaron a la órbita de la ANSeS "en virtud de la transferencia de beneficiarios del mismo a la órbita de la Asignación Universal por Hijo", como se reconoce en el Boletín Oficial.

Así, por este pase de partidas presupuestarias, la extensión de la asignación por hijo a trabajadores desocupados e informales a cargo de la ANSeS -como adelantó Clarín-
sirvió para liberar fondos del Tesoro Nacional que antes iban para los planes sociales. Pero se destinan gastos muy diferentes, como la publicidad oficial o los eventos del Bicentenario.

Los distintos planes (Familias, Jefes/Jefas, Pensiones no contributivas para madres de 7 o más hijos, asignaciones por hijos menores de 6 años que pagan algunos municipios del Gran Buenos Aires y otros planes provinciales) en total insumían unos $ 5.000 millones anuales que se financiaban con la recaudación de impuestos.

Esos planes comenzaron a ser absorbidos con la extensión de la asignación por hijo a desocupados, informales y monotributistas sociales que incorporó unos 4 millones de chicos a razón de $ 180 mensuales por chico ($ 144 más $ 36 contra la presentación de la Libreta Nacional).

Por año son unos $ 8.700 millones que ahora salen enteramente de las arcas de
la ANSeS.

A
sí los beneficiarios de esos planes, muchos de ellos con familia numerosa, tuvieron una mejora porque pasaron a cobrar la asignación por hijo que, en general, es mayor a lo que recibían por el plan.

Pero también el Tesoro se quedó con una diferencia. Porque al financiarse todo el régimen de asignaciones familiares a través del sistema previsional, tanto la Nación como las Provincias no deben gastar más plata en esos planes y ese "ahorro" queda para financiar nuevos gastos, sobre los cuales la Casa Rosada puede decidir con absoluta discrecionalidad.

Por su parte la ANSeS al hacerse cargo de la asignación por hijo con los intereses del Fondo de Garantía del sistema (FGS) sufre una "pérdida" o descapitalización.

Además esos intereses son incorporados en las planillas de la Tesorería como recursos corrientes, ayudando a maquillar el déficit fiscal. Por esa razón muchas consultoras cuando dan a conocer el resultado fiscal aclaran si es con o sin los intereses del Fondo de Garantía de
la ANSeS.

Tambi
én los trabajadores formales que perciben asignaciones familiares (que ganan menos de $ 4.800 mensuales) están financiando al resto porque muchos de los beneficios a los que tienen derecho están congelados hace tiempo, como por ejemplo la ayuda escolar anual.