Jorge, de 50 años, fue asesinado de un disparo en el corazón cuando intentaba proteger a su hijo y otros menores que, al momento del asalto, se encontraban dentro del negocio en el que trabajaba. Con esta víctima fatal, suman seis los homicidios en el barrio, que comenzaron seis semanas atrás.
Ocurrió el miércoles a la noche, en la cabecera distrital: dos criminales interceptaron y ultimaron a un vendedor que se encontraba guardando su camioneta en el garage del local de herrajes y carpintería “Babiy”, ubicado en Ruta Nacional Nº 3 al 4.500, entre Manuel de Sarratea y Pampa, en el barrio Villa Constructora. Allí, los sujetos le dispararon en el corazón a Jorge Antonio Aguirre, de 50 años.
Justamente, se trata de una zona sometida a una inusual seguidilla delictiva que, al momento, se cobró la vida de seis personas, desde que se registró el primer homicidio seis semanas atrás, cuando fue perpetrado el asesinato de Nicolás Rodríguez, comerciante del Mercado Central.
Al respecto del hecho que terminó con la vida de Jorge, su concuñado Norman, que estaba presente al momento del ataque, contó a El1 Digital que el hombre “estaba entrando la camioneta y el portón ya estaba cerrado, aunque quedaba la puerta de escape”. Entonces, de acuerdo al relato del testimonio, “pasaron dos tipos caminando y lo quisieron meter para adentro”.
Sin embargo, el comerciante se resistió a esa maniobra porque en el interior del negocio “estaba su hijo, de once años”, según contó su pariente y compañero de trabajo, quien añadió: “También, estaban mis dos hijos menores”.
En ese momento, los criminales abrieron fuego contra Jorge, que recibió una bala “en la zona del corazón”, como rememoró Norman. Luego, un grupo de empleados intentó trasladarlo a un centro médico, pero, al parecer, la víctima no tuvo chance ante la gravedad de la herida, por lo que habría fallecido en el camino.
Los otros casos
Además de este episodio y del asesinato de Nicolás Rodríguez, Villa Constructora sufrió la pérdida del chapista Eduardo Lombardi, acribillado delante de su pequeño hijo; de Nicolás González, que, en la víspera de su cumpleaños, que salió a defender a un amigo al que le estaban robando la moto y fue blanco de un proyectil; del remisero Juan Espósito, alcanzado por un tiro en la puerta de su casa; y del capitán del Grupo Halcón Omar Flores, que intentó defenderse del atraco pero fue ultimado por malvivientes que intentaban sustraer su auto.
En ese marco, se sucedieron diversas y multitudinarias marchas en pedido de seguridad y justicia desplegadas por allegados y vecinos de víctimas frente al Palacio Municipal, en el corazón de San Justo.
Por su parte, las autoridades prometieron redoblar esfuerzos y, con la supervisión del gobernador de la Provincia, Daniel Scioli, anunciaron la construcción de tres nuevas comisarías en La Matanza, además del apoyo que, desde la semana pasada, brindan los 160 gendarmes que prestan servicio en territorio local.
A todo esto, mediante numerosos procedimientos, la Policía concretó la captura de diversos sujetos acusados de algunos de los crímenes, operaciones que varios de los allegados a las víctimas consideraron satisfactorias, en primera instancia.
Sin embargo, frente a la continuación de la seguidilla delictiva, los vecinos, mediante reuniones y a través de las redes sociales, continúan debatiendo cómo organizarse para informar a la sociedad acerca de los casos y de qué manera continuar con las movilizaciones.