El pasado 31 de enero, el NCO publicó un comunicado de prensa de la secretaria de Planificación Operativa y Control Comunal después de la tragedia del boliche Kiss donde murieron 235 personas.
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| NCO. Enero 31, 2013 |
El comunicado de prensa de la secretaria de Planificación Operativa y Control Comunal —que no fue enviado por la subsecretaría de Comunicación, Prensa y Difusión y solo encontramos que levantó Tapiales Hoy que está seteado para replicar automáticamente las notas del NCO— comienza diciendo:
“Una vez más la tragedia enluta a los ciudadanos de un país hermano, por culpa de aquellos inescrupulosos que priorizan la facturación por sobre la seguridad de los asistentes a lugares de diversión y esparcimiento.
A fin de prevenir sucesos como el acontecido en el lamentablemente célebre “República de Cromagñon” o el que golpeó recientemente a la República Federativa de Brasil, ésta Secretaría dictó en fecha 1 de junio de 2012 una Resolución..."
Paremos acá, ya que luego enumera las resoluciones de la secretaría que serán parte de otro informe. Nada dice de la responsabilidad del Estado en ambas tragedias, como si la culpa siempre fuera del otro. Lo mismo ocurrió el pasado 4 de mayo de 2012, cuando en dialogó con E1, el secretario de dicha área, Daniel Roberto Feity señaló: “hacen trampitas buscando a la facturación, en vez de apuntar a la seguridad” al hablar sobre la seguridad nocturna y el 18 de septiembre de 2012 cuando dijo al NCO "Deben priorizar al seguridad por sobre la facturación". La tragedia en Brasil tiene su responsable y no pasó por la facturación. Por citar algunos ejemplos...
Llamativos comentarios del secretario en el comunicado, ya que luego de la tragedia del Club Kiss cerraron 60 boliches en Brasil. ¿y porqué razón?
Las autoridades brasileñas inspeccionaron y cerraron centros nocturnos en todo el país al día siguiente de la tragedia, como parte de un allanamiento contra lugares inseguros luego del fatal incendio que mató a 235 personas en el Club Kiss de Santa María en Río Grande del Sur. Ordenaron el cierre temporal de unos 58 bares, centros nocturnos y otros edificios públicos, reportó el diario local Em Tempo.
Según el medio, se habían detectado violaciones del código anti-incendios incluso dentro del edificio del ayuntamiento, entre ellas luces de emergencia defectuosas y extintores averiados.
El reconocido Licenciado en Seguridad, Luis Vicat, fue contundente al preguntarle si "la culpa es de aquellos inescrupulosos que priorizan la facturación por sobre la seguridad de los asistentesres". Vicat su directo: “Lo que falla acá es primero las habilitaciones, la gran falla está a nivel municipal en general porque no se controla ni cuando se habilita ni se controla después in situ. Máxime sabiendo que hay una reunión extraordinaria como ser que viene algún conjunto musical. Enviar un par de inspectores para que no se produzca lo que se produjo. En Brasil no había exceso de gente, pero todo se hizo bastante mal, hasta falló la señalética”.
El sitio web "Que no se repita" de familiares y víctimas de Cromañon explican porqué ocurrió una tragedia el 30 de diciembre de 2004 en el boliche República de Cromañon. La justicia actuó en consecuencia...
¿Qué Pasó En Cromañón?
El 30 de diciembre del 2004 un grupo de aproximadamente 2.811 jóvenes, de variados orígenes e intereses, se dispusieron a ver el show en vivo de la banda Callejeros, en un conocido boliche llamado República de Cromañón (también conocido como Cromagnon). Lo que iba a ser una fiesta concluyó con la trágica muerte de 194 chicos, y más de 700 heridos. ¿Qué sucedió allí?
Cromañon: El cómo y el porqué
A 2500 metros de la sede de la Jefatura de Gobierno funcionaba uno de los tres locales más amplios para la realización de recitales en la ciudad (). Entre marzo y diciembre de 2004 funcionó el boliche República de Cromañon.
Allí se realizaron más de 30 recitales, algunos superando las 5000 personas en un lugar que solo permitía 1031. La noche del 30 de diciembre actuó el grupo Callejeros.
A minutos de iniciado el espectáculo una candela encendida impactó sobre una media sombra creando un foco de incendio que derritió el material plástico. En instantes una densa humareda negra con gran emanación de gases tóxicos provocó una intoxicación mortal a 194 jóvenes.
El público, desesperado al querer huir, se encontró con la puerta de salida clausurada con un candado junto a una cantidad de obstáculos que hicieron complicada la evacuación.
Así era Cromañon
¿Qué debió haber observado el Estado, ejerciendo el poder de policía?
Que el portón debía mantenerse siempre abierto durante ante cualquier evento.
Los 9 metros de la entrada debían mantenerse constante hasta el ingreso al salón, sin embargo se angostaban 5 metros.
Una barra para consumo de bebidas no declarada en los planos angostaba aún más la circulación.
Una escalera de hormigón armado obstaculizaba el paso
La media sombra en el techo está prohibida por su alta carga de fuego.
Una salida alternativa estaba clausurada con cadena y candado.
En el entrepiso, según plano de habilitación, figura una ventana de 28,5 metros, estaba tapiada.
La circulación en el entrepiso estaba obstruida por 2 tabiques de madera.
El plano electromecánico con sello, no tenía aprobación.
El local no tenía grupo electrógeno.
No contaba con un sistema de extracción de aire.
Si las inspecciones se hubiesen realizado haciendo cumplir las normas se habrían hecho las reformas necesarias y aún con la impresibilidad de una candela y una puerta clausurada, el local hubiera resistido el siniestro.
Las boleterías debían cambiar de lugar evitando la estrechez de la entrada
La escalera de acceso al entrepiso debió desmolerse y desplazarla.
La barra del acceso no debió estar ahí.
Las columnas debían tener pintura fluor.
Debía haberse mandado demoler la mampostería que tapaba las aberturas y construir la ventana de 28.5 para complementar la ventilación. Esto hubiese permitido el día del siniestro, la fuga y salida de gases.
Debía demolerse los tabiques que interrumpían la libre circulación en el entrepiso.
Había una puerta clausurada que nunca debió haber existido.
Se debió exigir la instalación de los extractores electromecánicos y extractores eólicos y claraboyas en la azotea que garantizaran la expulsión del humo.
Esto no se hizo porque no se controló que en la azotea, funcionaban inexplicablemente 3 canchas de futbol en lugar de los extractores exigidos.
El Gobierno de la Ciudad recibió numerosas alertas que hablaban del gravísimo riesgo que se encontraban 400.000 jóvenes por fin de semana. Entre estas alertas, una proveniente de la Defensoría del Pueblo estaba referida a este local sobre su sistema electromecánico y de ventilación. Precisamanete por fallas en estos sistemas, perdieron la vida 194 jóvenes y quedaron secuelas permanentes en miles de sobrevivientes.
Durante el juicio, una alta funcionaria del área jurídica de Fiscalización y Control afirmó que el expediente de las intimaciones para las inspecciones de los bomberos fue encontrado en una caja azul lacrada con cinta y con una leyenda que decía: Personal. Esta caja se buscó afanosamente desde la misma noche del siniestro y misteriosamente apareció 3 días más tarde sobre un armario a la vista de todos, luego del arribo de la directora de la Unidad Polivalente de Inspecciones, persona que fue procesada.
La funcionaria declaró textualmente en el juicio: “Hoy por hoy, de hecho, también se nos está complicando dar respuesta a determinados requerimientos porque al no estar todo inventariado, al no tener un sistema que reflejen todas las actuaciones que están circulando es complicado. Entonces, las actuaciones se desglosan, se pierden. La verdad es que, hoy por hoy, no me animo a decir que se perdió intencionalmente… o no”.
"Cromañon, aprendamos de lo que pasó para que no se repita".
Funcionarios a la cárcel
Uno de los hechos más destacados por los familiares y abogados de las víctimas de Cromañón es que tres funcionarios están presos. "Esto es histórico, es la primera vez que funcionarios civiles van presos por un hecho así", dijo a LA NACION el abogado Fernando Soto.
Uno de los hechos más destacados por los familiares y abogados de las víctimas de Cromañón es que tres funcionarios están presos. "Esto es histórico, es la primera vez que funcionarios civiles van presos por un hecho así", dijo a LA NACION el abogado Fernando Soto.
Fueron condenados los siguientes funcionarios públicos:
- El exsubcomisario Carlos Rubén Díaz, a la pena de 8 años de prisión e inhabilitación especial perpetua, por los delitos de incendio culposo seguido de muerte y cohecho.
- Fabiana Gabriela Fiszbin, ex Subsecretaria de Control Comunal del G.C.B.A., a la pena de 4 años de prisión.
- Ana María Fernández, ex Directora General Adjunta de la Dirección General de Fiscalización y Control, a la pena 3 años y 6 meses de prisión, por el delito deomisión de deberes de funcionario público en concurso ideal con incendio culposo seguido de muerte.
- Gustavo Juan Torres, ex Director General de Fiscalización y Control, a la pena de 3 años y 9 meses de prisión.
El exsubcomisario Carlos Rubén Díaz, a la pena de 8 años de prisión e inhabilitación especial perpetua, por los delitos de incendio culposo seguido de muerte y cohecho.