sábado, julio 07, 2012

La cuna de La Matanza devastada por la política

Más de 15.000 embarazadas matanceras deben buscar distritos vecinos que las asistan en el parto. La Matanza tiene la maternidad del Policlínico de San Justo equipada, pero la desidia política hace que este cerrada hace cuatro años...
Policlínico Central San Justo. Almafuerte 3016, San Justo. 

El Policlínico de San Justo fue conocido como la cuna de La Matanza, atendía más de dos mil partos por año. En agosto del 2008 fue cerrado por reformas edilicias, que según los primeros planes deberían haber durado seis meses, pero cuatro años después no logra reactivarse y no se conoce exactamente qué es lo que el Municipio planea hacer con esa institución. Mientras el poder político decide, 15 mil embarazadas matanceras se ven obligadas a recorrer hospitales de otros distritos, en busca de un lugar en el cual dar a luz a los bebés que La Matanza rechaza. 

Nacer no es un juego

La maternidad del Policlínico de San Justo, fue hasta el 2008 la cuna que recibía a más de dos mil bebés por año. Contaba con un completo equipo de especialistas y aparatología de avanzada. En agosto del 2008 la gestión de Fernando Espinoza decidió cerrar, por seis meses, el área de maternidad para poder resolver problemas en las cañerías. Cuatro años después, no hay respuestas acerca de lo que pasará con ese sector. 

Según se esgrime desde la Secretaría de Salud Pública, a cargo del doctor Francisco Grosso, “las reformas aun no están habilitadas, falta el visto bueno de los arquitectos de Provincia y del Municipio, que trabajan al unísono para lograr un servicio seguro, tanto para pacientes como para el equipo médico”. 

Por su parte, los profesionales de la salud acusaron que se está especulando con la apertura de los hospitales provinciales y aseguraron que es necesario articular una política municipal y provincial para poder atender a todas las embarazadas del Distrito. Ya que el 50 por ciento de ellas debe buscar otros Municipios que le den una cama en la cual parir. 

“La idea es que puedan abrir finalmente esos hospitales, que están tan dilatados, pero no en detrimento del cierre del Policlínico Central, que logró ser una de las maternidades mejor preparadas del Distrito, realizando dos mil partos por año. Con un equipo médico completísimo y hoy por esta falta de interés se realizan cero partos y la mayoría de los profesionales renunciaron”, graficó la presidenta de la Asociación de Profesionales de la Salud local (APS), Patricia Suar. 

Mientras que el secretario General de la APS, Pedro Zamparolo opinó en diálogo con Periódico S!C que “la fantasía política de la Secretaría de Salud es la de soñar con que los hospitales nuevos van a tener sus maternidades y por eso quieren sacrificar la del Policlínico”. 

Más adelante, remarcó que “la maternidad del Policlínico debe estar abierta, no podemos dejar eso así con todo ese equipamiento. Pero lamentablemente hay otra idea por parte de las autoridades. Hay una resistencia de la Secretaría (de Salud) para reabrir la maternidad del Policlínico, entendemos que con el pretexto del edificio, de la falta de una salida de emergencia y el programa de construcción llegamos al cuarto año sin funcionamiento”. “Injusticia social, es lo que viven las embarazadas jóvenes porque la primera dificultad es llegar a la salita barrial, para llegar al Policlínico deben sortear dificultades para salir de los fondos de La Matanza y luego recorrer hospitales en los que las puedan asistir en el momento cumbre”, criticó Zamparolo. 

Según las estadísticas con las que trabaja el gremio de la APS, sería absolutamente necesario lograr un trabajo articulado entre los hospitales del Municipio y de la Provincia, para poder contener las miles de parturientas anuales dentro del Distrito. 

“Se necesitan en óptimo funcionamiento los hospitales municipales y los dos que dependen de Provincia, a eso le sumamos los nuevos que están en construcción y recién allí podríamos hablar en que La Matanza podría dar garantía a las embarazadas y comenzaríamos a cambiar la historia y a pagar un poco de la deuda histórica que tenemos con la maternidad”, analizó María Rosa Rodríguez, jefa de tocoginecología del Policlínico Central de San Justo. 

Por lo que insistió en que “esa sería la única solución porque es claro que la gente se va a parir por fuera y queremos cambiar la historia, pero necesitamos el compromiso de todos”. Según denunciaron los profesionales médicos, cada vez se realizan “menos partos” en el Distrito, debido a “la política de vaciamientos”. 

Más del 50 por ciento de los nacimientos, 15 mil en total se realizan en partidos limítrofes. “La deuda de La Matanza con las camas de maternidad es histórica, se profundizó hace diez años con una profundización máxima desde hace cinco años, donde no han puesto nada de dinero a la salud y menos a las maternidades. La mirada que le damos es que lo prioritario es la atención materna infantil y disminuir la mortalidad materna en Argentina y en este punto el aporte de La Matanza es grande”, detalló Rodríguez (ver Estadísticas). 

Los expulsados del sistema de salud 

Los profesionales consultados coincidieron en que las principales perjudicadas con esta “política de vaciamiento de las maternidades son las madres que están por dar a luz, ellas entienden y tienen naturalizado que los controles están permitidos, pero el parir no, entonces buscan algún distrito vecino que las pueda cobijar y contener durante su parto”. 


Policlínico San Justo. La terraza...

“Lo tienen clarísimo, ya saben que en un punto llegan y después buscan dónde tener a su hijo, La Matanza se caracteriza por ser un lugar de gente sufrida, pobre, acostumbrada al maltrato y esto forma parte de un maltrato más”, consideró la jefa de tocoginecología del Policlínico. Por lo que añadió que dentro de la institución se contiene y atiende a las embarazadas, pero lamentó que “no puedo hacer nada por ellas a la hora de su parto, porque aparte no consigo una cama en La Matanza. Si estoy cerrada yo, están abiertas las demás (maternidades) para reubicar a mis pacientes pero no puedo, estamos todas mal”. 

En esta línea observó que “no hay una política de cuidado materno, se nota en el hospital Equiza de González Catán, hoy es un hospital que no tiene jefes de obstetricia, de neonatología ni de pediatría. No tiene directores de carrera. Eso te arma un escenario de inseguridad que la población lo percibe en la atención que se brinda. No hay médicos que quieran trabajar en este escenario y el costo lo pagan las parturientas”. “En Teresa Germani de la localidad de Gregorio de Laferrere, aun no perdió todos los jefes, pero tienen mucho déficit, usaban 21 médicos para trabajar y siete parteras y de ese equipo médico han quedado 12 profesionales, en este momento deben hacer un cambio hay una gran falta de personal”, resumió. 

Mientras que el Policlínico Central de San Justo contaba, años atrás, con la dotación más que completa, “pero con cuatro años de cierre y una política de traslado perdimos todos los neonatólogos a fines del 2008 y han quedado seis médicos de guardia de los 12 que había. Esta historia de La Matanza es casi irreversible si las autoridades no le hacen una mirada política a la situación, porque el fondo ya se tocó”, expresó Rodríguez. El Policlínico Central de San Justo semanalmente inicia la consulta de 60 nuevas pacientes, las mismas generan por lo menos siete consultas durante el embarazo. Las prestaciones generales anuales, según datos de la APS, son de 25 mil. 

Unas 2.500 prestaciones mensuales “que a la hora de parir buscan otro Distrito”. Por otra parte, se analizó que el servicio actual del Policlínico puede menguar un poco el desastre en el déficit de la atención materno infantil, “hay seis camas compartidas con clínica médica, cirugía y ginecología y con ellas, los neonatólogos podemos solucionar emergencias, podemos recibir algunos traslados hasta que hagan la remodelación completa. Pero no hay movida de nada, no hay un pensamiento dirigido a una apertura es obvio que no lo hay”. 

Nacimiento en números 

Por año nacen 30 mil niños del Distrito, el 50 por ciento de ellos se asiste en el ámbito privado o en otros distritos limítrofes. El resto, 15 mil partos, son realizados dentro del ámbito de salud pública de La Matanza. Pero, las pésimas condiciones con las que se ven obligados a trabajar los profesionales de los hospitales locales, y la ausencia de una seguridad que permita reflotar un parto complicado, son los obstáculos que impiden atender más partos, pese al esfuerzo de los profesionales médicos.


Policlínico San Justo. Depósito de colchones

Desde hace cuatro años el Policlínico Central de San Justo dejó de atender dos mil partos anuales. El materno infantil de González Catán en el 2011 hizo mil partos, el 50 por ciento menos que en el 2010. El materno de Gregorio de Laferrere asistió 860 partos, y este es el lugar más densamente poblado de La Matanza, años anteriores hacía 2.500 partos. 

“Queremos que se reabra la maternidad del Policlínico, con 20 camas que tenemos estamos en condiciones de hacer dos mil partos por año. Entonces, dos mil del de Ciudad Evita; dos mil del Equiza; dos mil del Germani de Laferrere, sumado a otros dos mil del Policlínico y los de alto riesgo que se atiendan en el Paroissien, por su complejidad. Entendemos con esta suma que con una política integrada entre el Municipio y la Provincia, estaríamos a la altura de las necesidades. Y las embarazadas no solo se controlarán los embarazos de bajo riesgo en los centros de salud, si no que podrán tener a sus bebés en La Matanza”, enfatizó la jefa de tocoginecología, María Rosa Rodríguez. Y remarcó que “si todos los nosocomios funcionaran correctamente los números serían redondos y todos los nacimientos podrían atenderse en el Distrito”. 

ENTREVISTA A FRANCISCO GROSSO 

La Secretaría de Salud aún no sabe qué pasará con la maternidad del Policlínico. “Estamos analizando la refuncionalización del Policlínico Central de San Justo”, insistió en diálogo con Periódico S!C el secretario de Salud Pública local, Francisco Grosso. 


Francisco Grosso. Secretario de salud de La Matanza.

El funcionario, asumió en diciembre último en una cartera por de más delicada, entre muchos de los problemas ante los cuales debe pararse el secretario, se encuentra la presión de reabrir o no el área de maternidad de esa institución sanitaria. 

Los argumentos que esgrimen desde la cartera de Salud, es que “falta que los arquitectos presenten los planos” y una vez que logre analizar esos documentos “se anunciará cuál será la refuncionalidad del Policlínico”. Ante las consultas realizadas por este medio, el doctor Grosso respondió: “Soy un simple médico, las respuestas las darán los arquitectos las próximas semanas (por la última semana de junio)”. 

“Nada está excluido, falta la escalera de emergencia. Quiero un hospital seguro para el paciente y para el personal. Mi visión es tener hospitales seguros. Esto aún no está habilitado y cuando me entreguen los planos, pondremos a consideración la refuncionalidad de todo el Policlínico”, insistió. 

Ante la pregunta de por qué, tres años después, se está analizando la seguridad de las obras realizadas, cuando la lógica indica que al ejecutar un plano de refacciones tendría que estar contemplado el tema de la seguridad, el funcionario respondió ; “yo no estaba en esa gestión, asumí en diciembre. Uno supone que si hay un plan de la construcción, hay un plano con seguridad edilicia. 

Pero hay que contemplar todo”. En esta línea María Rosa Rodríguez, la jefa de tocoginecología del Policlínico, opinó que el doctor Grosso “tiene un discurso muy ambiguo con este tema, se han gastado dos millones de pesos en la remodelación del Policlínico, que no digo que no se necesitaba. Pero se necesitaban arreglos básicos, que tenían que ver con los caños, porque era una maternidad vieja”. “Con ese criterio de la seguridad, estamos en condiciones de implosionar a todos los hospitales públicos de la Argentina, no solo al Policlínico. Pero sabemos que con medidas baratas se puede dar seguridad. Falta la última parte de la remodelación, que es el área de primer piso de internación de la maternidad, la misma se terminará cuando se realice la tercera parte, en la que se sacarán los caños del primer piso a los laterales y se completarán las salidas de evacuación. Pero son pretextos, son discursos para aguantar el tiempo”, estimó. 

Por lo que arremetió que “si tanto temor le da al secretario el tema de la seguridad, tengo que decirle que hoy se realizan en esa neo, tan insegura como dice él, operaciones de manera permanente. En el área quirúrgica trabajamos sin escalera de evacuación, así que eso de que no reabren por seguridad es una absoluta mentira”.

Criticó que “si impunemente gastamos dos millones de pesos y viene el trasnochado de turno y dice no esto es muy inseguro, está mal la cosa”. Por su parte, la presidenta de la Asociación de Profesionales de la Salud, Patricia Suar opinó que “la remodelación está prácticamente terminada, no está claro el tema de la evacuación y la salida de emergencia. Se hizo una inversión de millones de pesos, y estuvo mal hecha la planificación”. Rodríguez destacó que el área de maternidad cuenta con dos quirófanos que son de primer nivel, dos salas de parto, una de las cuales está equipada con una camilla que permite practicar una cirugía sin necesidad de traslado y evita mover a la madre y que pierda tiempo el feto. 

Pero esta aparatología “está archivada ahí, sin uso”. Y agregó que “la parte de arriba del edificio es una terrible neo con 12 plazas de terapia, con 12 incubadoras de alta complejidad, que están apiladas, tiradas desde el año 2011, fecha en la que se completó la remodelación del segundo piso”. 

Esgrimió que “es clarísima la vocación de las autoridades de Salud de La Matanza, que es la de utilizar el poco recurso humano que les queda para bancar lo que no pueden, que es surtir la salud primaria. Quieren gastar lo menos posible. Va a ser muy complicado revertir esto”. “Hemos reclamado al Concejo Deliberante que autorizó esos gastos, pero no hay un seguimiento ni un compromiso. No tenemos respuesta y entendemos que contra los molinos de viento no se puede luchar. Acá tenemos un gasto de dos millones de pesos en una remodelación que no habilitan, hay concejales, arquitectos municipales y un secretario de Obras Públicas que no dan respuestas. Acá hay otras cosas que tienen que ver con política, con plata”, examinó. 

“No se reabrirá” 

Así lo aseguró a S!C el concejal Gustavo Ferragut, del monobloque del GEN-FAP, que durante las reuniones previas a la aprobación de la memoria anual de gastos del 2011, se presentó en el recinto legislativo el secretario de Salud, Francisco Grosso, y en ese momento el edil opositor le consultó acerca de la reapertura del área de maternidad del Policlínico a lo que, según explicó Ferragut: “Verónica Magario respondió que no se reabrirá”. 

Policlínico San Justo. Visita al segundo piso.

Y mencionó que se habló acerca de “la verdadera planificación”, la cual sería “no reabrirlo, y trasladar todo al nuevo hospital de Ciudad Evita”. 

“Cuando le realicé la pregunta al Secretario (de Salud), Magario, que estaba sentada al lado mío, me miró y me peguntó por qué no le hacía esa pregunta a ella que era la que estaba en la gestión”, recordó el concejal margarito. 

“El Intendente debe entender que deberíamos sentarnos a armar una política de salud, hay un gran déficit. Las cosas van explotando y no hay desarrollo, ni propuesta para adelante”, sentenció. 

CRONOGRAMA DE UN CIERRE ANUNCIADO 

Agosto 2008: Comienzan las remodelaciones que tardarían seis meses. Enero 2011: El director del Policlínico Central, Juan Carlos Duarte, anunció que las obras en el segundo piso ya fueron completadas. Así, la maternidad “será reabierta en un plazo estimado de dos semanas”. La espera sería la necesaria para poner en condiciones los aparatos. 

Mayo 2012: El secretario de Salud Pública de La Matanza, Francisco Grosso, aseguró que en menos de un mes se presentará el dictamen de los arquitectos e ingenieros para readecuar el funcionamiento del Policlínico y se analizará la posibilidad de reabrir la maternidad o mudarla a otro lado. 

Junio 2012: Grosso reafirmó que “en la última semana de junio o principio de julio estará la decisión tomada”. 

Estadísticas sobre la mortalidad materna e infantil en La Matanza 

Según las estadísticas aportadas el año último por el Ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires, durante el año 2010 la mortalidad infantil en el Distrito fue de 11,4 por ciento y la materna 6,2. Murieron 28 niños por mes y tres madres cada dos meses. Mientras que en toda la provincia de Buenos Aires se registró una tasa de mortalidad infantil del 12 por ciento y una mortalidad materna del 4,3 por ciento. En La Matanza de un total de 28.983 nacimientos, registrados durante el 2010, existió una tasa de natalidad del 16,3 por ciento. La defunción de niños de hasta un año fue de 331 casos, lo que dio como resultado una tasa de mortalidad infantil del 11,4 por ciento. 

Esta estadística bajó durante el 2011 en el que hubo en total 297 defunciones infantiles. Mientras que del total de 28.983 niños nacidos en La Matanza, hubo 18 defunciones maternas, 1,5 por mes. Y en la provincia de Buenos Aires, de 288.505 niños nacidos vivos, hubo 124 madres que perdieron la vida.