Junto a dirigentes de la oposición, sostuvo que existe un “clima antidemócratico”…
Felipe Solá juntó ayer a referentes políticos de la oposición de la provincia de Buenos Aires para reclamar que “se detenga la creciente escalada de violencia” de la últimas semanas y se respete una “convivencia política civilizada”.
Lo hizo en San Justo en la esquina de Perón e Illia. Pero lo que podía parecer un guiño a la tolerancia reclamada en realidad porque se encontraba en el mismo lugar del que 24 horas antes se habían llevado a Cintia Acuña, la secretaria del concejal felipista de La Matanza, Fernando Asencio que fue golpeada y advertida: “Decile a tu jefe que se deje de hacer quilombo en el Concejo y se quede tranquilo”. Acuña pudo escaparse arrojándose del auto mientras atravesaba un descampado.
Solá vinculó el hecho a otros ocurridos en los últimos días.
Los escraches que sufrió Eduardo Duhalde, los dos balazos que impactaron en el auto del concejal José Alessi (Unión Celeste y Blanco) de Avellaneda, las amenazas a un micro de militantes de Libres del Sur en La Matanza y el copamiento del lugar donde el propio Solá iba a realizar un acto la semana pasada en San Nicolás.
El jefe del bloque de diputados del Peronismo Federal habló de un “in crescendo” en el “clima antidemocrático” . Y analizó que volver a los carriles normales “es una responsabilidad de todos, pero más de los que mandan”.
Acuña llegó caminando con esfuerzo del brazo de sus padres y se sentó al lado de Solá, en una mesa del bar El Artesano. “Soy una militante joven y esto nunca me había pasado.
Tengo miedo, mucho miedo”, confesó tras referirse a los golpes que había recibido en el estómago, la cabeza y las costillas.
De un lado, se ubicaron los dirigentes de Libres del Sur, Jorge Ceballos y Victoria Donda. “No podemos naturalizar la violencia en la sociedad. Este también es un caso de violación a los derechos humanos”, aseguró la diputada.
En el otro extremo de la mesa estaban los dirigentes de la Coalición Cívica Horacio Piemonte, Héctor “Toti” Flores y Elsa Quiróz. “Este régimen intenta que nos descomprometamos. No podemos mirar para otro lado si queremos vivir en paz”, dijo Quiróz.
Nadie quiso responsabilizar al intendente Fernando Espinoza (Frente para la Victoria), que llamó para solidarizarse. Pero todos mencionaron las amenazas cotidianas a los concejales opositores que traban algunos proyectos millonarios en el municipio.
“Advierto a la Policía bonaerense que esto no puede volver a ocurrir. Si tienen algo que ver con esto o saben quién pudo haber sido, actúen ya mismo”, arremetió Solá en su pasaje más exaltado.
Diario Clarín
http://www.clarin.com/politica/partidos/Sola-detenga-creciente-escalada-violencia_0_294570577.html