La presidenta del cuerpo llamó al concejal del PRO y le pidió que le desocupara la oficina porque necesita lugar para “su gente”. El edil se negó a retirarse y piensa atrincherarse en el lugar. El diálogo entre Magario y Asencio.
Eran las 21.30 de ayer cuando la presidenta del Concejo Deliberante de La Matanza Verónica Magario se comunicó telefónicamente con el concejal del PRO-Peronismo Fernando Asencio.
“Hola Fer cómo estás”, se escuchó con voz suave del otro lado del teléfono. “Recién vengo de jugar al tenis, estoy cansado”, fue la respuesta de Fernando Asencio. “¿Querés que te llame en otro momento?”, preguntó cordialmente la nueva jefa del CD. “No, está bien, decime”, respondió el concejal opositor.
El pedido que siguió provocó la reacción inmediata de Fernando Asencio: “Necesito que dejes tu oficina, necesito poner a mi gente”, reclamó Verónica Magario en una solicitud que ya le había hecho al edil en abril último cuando dejó de ser el vicepresidente del cuerpo, puesto que quedó en manos del oficialista Pedro Ramírez.
La respuesta del concejal del monobloque PRO-Peronismo no se hizo esperar: “Mirá Verónica, en mi oficina gaste mucha plata de mi bolsillo, la hice a mi medida, y jamás el Concejo (Deliberante) me dio un centavo, así que no me pienso ir”, se quejó en tono de advertencia Fernando Asencio.
No conforme con la postura de su par peronista y segura de poder convencer, Verónica Magario propuso seguir charlando el tema hoy. “Vos tenés que entender yo ya te lo dije cuando inauguramos sesiones, lo que pasa es que está muy opositor”, continuó la posible heredera del trono de Fernando Espinoza.
“Vos me estás apretando porque viene el tema del transporte, hay cuatro vivos que se juntaron en un bar y decidieron a quién le toca ese piso, yo no me pienso ir, esto es una provocación”, tiró Fernando Asencio ya en un tono menos cordial y visiblemente enojado.
En diálogo con el Periódico S!C, el concejal justicialista confirmó la conversación y sostuvo que la presidenta del Concejo Deliberante “necesita el lugar para la gente que fue expulsada de Control Comunal”, esto en clara referencia al exjefe de la criticada área Alberto Olmos, hoy jefe de asesores de Magario.
Aunque Asencio fue más allá cuando criticó: “Hoy la oficina de la Presidencia parece una Unidad Básica, son unos vagos, a los que laburamos nos echan y los vagos se quedan tomando mate”.
“De ahora en más todos los temas lo vamos a hablar en el recinto”, advirtió el concejal en una historia que recién comienza y promete ribetes novelescos.