La construcción es hoy, un negocio redondo que si sabe interpretarlo es aún redituable a pesar de todos los adornos que requiera...
Castelli 171. El arquitecto Antonio Blasi en el papel del ingeniero civil Rafael De Anseris |
1- Consiga un profesional sin escrúpulos, no es problema si ya tiene sanciones por falsificación o delitos similares, al contrario la experiencia es valorada. Lo que en la jerga se denomina un "prestafirma" y registre un plano de obra en forma "exprés".
2 - Guarde el plano registrado en un cajón junto con la normativa de construcción (ambas cosas no lo va a necesitar más) y demuela, construya y siga adelante de la forma que mejor le parezca procurando maximizar los metros cuadrados vendibles sin importar alturas, retiros, invasión a linderos ni demás cuestiones reglamentarias que limitan la "iniciativa privada".
3 - Si los vecinos protestan o presentan denuncias en la Dirección de Fiscalización de Obra y Regulación Catastral o en la secretaría de Planificación Operativa y Control Comunal, no se haga problema. Ud. saque el plano registrado del cajón, muéstrelo para demostrar que la obra cuenta con el permiso y en lo posible muéstrese indignado por la gente que no entiende y quiere detener el "progreso". Por las denuncias presentadas no se haga problema, los funcionarios se ocuparan de hacerlas dormir el sueño eterno... Y si por casualidad hay un error y algún funcionario se le ocurre aplicar la ley y pretender aplicar las sanciones del caso (multa y demolición), tampoco se haga problema, se ocuparán de hacerlo renunciar como ocurrió en Alvarado 607, donde el arquitecto Antonio Blasi antes de dejar su lugar en la obra, a pesar de contar con las amplias ventajas de ordenanzas no convalidadas por el P.E.P. (Decreto provincial 214/07) violó en 23% el artículo 46° del Decreto-Ley 8912/12, hizo un piso de más y vendió las oficinas comerciales como departamentos con vista a la calle.
4 - Si se le fue la mano con las macanas y las cosas se ponen difíciles por culpa de esos vecinos belicosos que quieren detener el progreso de la humanidad, incluso para los funcionarios con su capacidad de inventiva y evasión para frenar el reclamo, cambie al arquitecto prestafirmas por otro de similar tenor.
5 - Con este sencillo proceder (que es cierto le costará unos pesos más, pero nada en comparación con la rentabilidad adicional que podrá obtener con los metros cuadrados que construya por encima de lo permitido), Cartón Viani, Caín Olmos y Verónica Salva Dólares, justificaran una resolución donde darán por superado el problema sin siquiera solicitar la corrección de la construcción fuera de regla.
6 - En todo este proceso tenga presente de construir rápido, si es posible trabajando sábados y domingos. Si es necesario viole clausuras transitorias siguiendo el ejemplo de Corrientes 90 (M.M.O. Carlos A. Casemajor), Vicente López 239 (arquitecto Gerardo José De Carlo) y Saavedra 253 (arquitecto Antonio Blasi). Tenga presente que más allá de todas las barbaridades que se le ocurran hacer, el ladrillo que se pone en la obra, este o no en regla, una vez puesto CASI NUNCA lo obligaran a sacarlo, con lo cual, está claro que la premisa es el "hecho consumado" aunque este no se aplique en la constucción y por tal motivo, nunca es corregido el error intencionado aunque el Código Urbano y la LOM 6769/58 establezca la facultad a nuestros funcionarios de ordenar la demolición de lo irregularmente construido.