Llueve sobre mojado...
Volvió a llover y quedó en evidencia que todo sigue igual. Los sumideros son una decoración más en una ciudad cementicia, pero el agua, siempre fue un problema para los ramences...

Muy pocos recuerdan que la inauguración del túnel peatonal bajo las vías del ferrocarril fue en junio de 1980 y que la lluvia ingresó en el túnel y lo inundó justo cuando se inauguró, mojando la presencia de autoridades provinciales, municipales y la bendición del Monseñor Bazán.
En el plano actual, existe una dificultad más importante que este recuerdo, y que el agua, pese a haber pensado que la obra sería una solución, el túnel se utiliza poco.
Pensar que en 1858, con la llegada del ferrocarril al pueblo y con tan pocos habitantes en el partido, dos pasos a nivel eran más que suficientes para justificar una adecuada relación entre Norte y Sur. Hoy nadie sabe como mierda solucionar el colapso del tránsito que generaron los inteligentes del HCD en una localidad que leyendo su historia, era una zona de quintas y de residencias con grandes superficies... y menos cuando llueve!