La inseguridad golpea a Ramos Mejía. En los últimos dos meses se multiplicaron los hechos delictivos en la ciudad, con sucesivos episodios en los que la modalidad de secuestro express y robo son las más comunes. Ya hubo una concurrida marcha frente a la comisaría de la zona y desde el gobierno provincial anunciaron la llegada de más policías.
El último hecho se registró esta semana, cuando un matrimonio fue interceptado por un grupo de delincuentes en Pasco y Avenida de Mayo, y obligaron a la pareja a conducir hasta su domicilio para desvalijarles la casa. La mujer fue liberada en el domicilio, mientras que al marido lo tomaron como escudo y, tiempo después, lo dejaron bajar del auto en un descampado en El Palomar. Se llevaron distintos objetos de valor, joyas y dinero que cargaron en el auto de las victimas.
Otro hecho que sorprendió y preocupó por sus características en los últimos días tuvo lugar el destacamento policial de Lomas del Millón (Ramos Mejía). En esa dependencia, de la esquina de General Acha y Balcarce, una caja fuerte que contenía el arma 9 mm de una oficial suspendida y otra que había sido secuestrada en un operativo, fue “reventada” en circunstancias desconocidas, según se informó. La caja, de donde desaparecieron las armas, debería ser custodiada durante las 24 horas por un agente de guardia.
El miércoles 14, unos 400 vecinos se congregaron en la esquina de Rivadavia y Avenida de Mayo. La consigna fue “justicia y seguridad”, ya que la ciudad ya venía siendo blanco de una serie de hechos. La marcha se traslado a las puertas de la Comisaría 2° para plantear el reclamo. Por esos días, el gobernador Daniel Scioli arribó al distrito y se vio obligado a hacer referencia a Ramos Mejía, e incluso rememoró su pasado como vecino de la ciudad en su juventud. En ese marco anunció la llegada de unos 400 efectivos para el distrito.
Seguidilla
El 10 de mayo, cuando llegaban a su casa de Larrea al 100, Oscar Giral de 56 años y su mujer Nora Díaz fueron abordados y amenazados por delincuentes, ingresaron a su casa a la casa y les robaron dinero, joyas y electrodomésticos. Más tarde, se los llevaron cautivos en el Mini Cooper de la familia. Los delincuentes dejaron a la mujer en inmediaciones de la Villa Pineral, en Tres de Febrero; mientras que su esposo fue liberado una hora después en la villa Carlos Gardel.
A fines de ese mes, el 29, dos menores cruzaron a un empresario al que forzaron a entrar a su casa en Tacuarí el 500, donde se encontraban su mujer y la hija del matrimonio. Les exigieron dinero e intentaron secuestrar a la hija. En ese momento, el dueño de casa, de 55 años, se trenzó en una pelea con uno de los asaltantes. El otro, intentando defender a su compañero, disparó contra el empresario, a quien hirió, pero también mató al joven.
El 14 de junio fue sorprendido por unos delincuentes en la puerta de su casa, en Beruti al 100,Emiliano Martinó, de 33 años. Le exigieron que les entregara el dinero que tenía para realizar un negocio inmobiliario. Los ladrones notaron la presencia de un patrullero de la comisaría de Ramos Mejía, alertado por un vecino. Iniciaron la huida y, tras un tiroteo entre la policía y los ladrones, murió Emiliano, que era mantenido como rehén, y uno de los ladrones.
A principios de julio, tres delincuentes perpetraron un robo en una casa de Belgrano al 700 y se llevaron de rehén al matrimonio dueño de casa. Primero le sustrajeron joyas, dinero en efectivo y dos computadoras. Más tarde, subieron a la pareja a bordo de dos autos y los liberaron en Villa Luzuriaga.
El diario de Morón