jueves, diciembre 08, 2011

El municipio está por estallar

El triunfo del oficialismo lejos estuvo de calmar las aguas y ahora todos reclaman su pedazo de torta. Las porciones no alcanzan y el intendente no sabe como tapar las bocas que se abren...
 

Desde el armado de las listas hasta hoy, la guerra municipal no encuentra tregua y como está el cielo, todo invita a llorar. Pero la historia es lejana, los muchachos madrugaron y salieron a pedir pista desconociendo los favores que deben pagarse en vida y sin querer, ellos mismos se encargaron de saca los trapos al sol para escalar peldaños. Mostar quien es quien en este juego y quien merece estar a la hora del reparto fue el fin, pero ni así la puerta se abrió...

Heridas por doquier supo cosechar Fernando y es el lamento quien golpea oídos acarreando voluntades en su contra. Nada es lo que parece con solo ver que la seducción de la hija del Dr. Peñaloza -que tanto éxito le dio en su carrera- no surge efecto entre quienes tienen los pies sobre la tierra y solo acumula una larga cola dolidos que sacan número para saltarle a la yugular. Ella sabe de lidiar pero deberá a aprender -al menos por un tiempo- a convivir en esos términos...

Pero ya se sabe, sólo en la teoría los peones no retroceden, ya que siempre manda el dueño del juego. Así se encargó de recordarlo el profesor quien siempre trae al presente que renunció a su sueño de viajar a La Plata por pedido exclusivo del tío Balestra y que no se come los mocos ante un portero de escuela. El hombre reconoce que está viejo pero hasta ahí, ya que aclara que aún tiene buena memoría para recordar los remitentes de los sobres...

La mirada está fija y la vaga ilusión de algunos sería que Petit, quien supo sembrar en su guarida suficientes enemigos por su fallida jugada, después del resultado del 15 se ponga a la altura de las circunstancias aunque matemáticamente no es posible...

Después solo resta ver como los porteros del HCD local digieren la camada emtrante de laferrenses que le hacen honor al Pato Avelar. Tomando como eje la famosa vieja frase de una obra de teatro del  mexicano Carlos Fuentes, ellos dicen que con un sólo ojo son reyes ante los invidentes que asumen y ya adelantaron que se lo van a echar en cara. No tienen problema de decir que tienen una limitación evidente pero arengan que los que asumen están peor y acusan que Don Videla y el Dogo, saben de que están hablando...